SEGOVIA

Segovia es la última ciudad que he visitado siguiendo mi curiosidad por conocer las joyas históricas que posee Castilla y León. Residencia de la corte castellana durante siglos, esta pequeña ciudad castellano-leonesa cuenta con mucha Historia entre sus calles. Arte romano, arte románico, arte gótico... esta ciudad es un escaparate al aire libre de las huellas artísticas de nuestros antepasados. 

El Alcázar  y la catedral al fondo

La particularidad es, para mí, lo que más destaca de dicha ciudad. La apariencia de pueblo que no deja entrever el paso del tiempo y que mantiene la esencia de la importancia que Segovia tuvo en su día. La ubicación elevada y rodeada de valles que la convierten en un paraje natural. Rincones que parecen sacados de un cuento. Calles de piedra, cuestas, senderos, escaleras semiescondidas... Segovia es un compendio de entresijos que te lleva a descubrir su encanto. Visitar y conocer la ciudad segoviana se centra en sus tres imprescindibles: el acueducto romano, el Alcázar y la catedral.

El acueducto desde la Plaza del Azoguejo

El acueducto es el monumento histórico más reconocido de dicha ciudad. Está datado del siglo II d.C. y es Patrimonio de la Humanidad desde 1985. Se encuentra en la Plaza del Azoguejo, aunque no sólo se mantiene lo que se puede apreciar en esta plaza sino que recorre más zonas de la ciudad debido a su extensión. A las faldas de la muralla se localiza el llamado Mirador del acueducto. Dejando el acueducto atrás y accediendo a la calle Cervantes desde la Plaza del Azoguejo, vamos a parar a la Plaza Mayor donde se encuentra la catedral. 

La catedral de Segovia, denominada originalmente Santa Iglesia Catedral de Nuestra Señora de la Asunción y de San Frutos, se construyó entre los siglos XVI y XVIII sobre los restos de la antigua catedral segoviana que fue destruida en la Guerra de las Comunidades. Su estilo es gótico tardío, aunque con toques renacentistas, por lo que dicha catedral fue una de las últimas en España en construirse en este estilo. Está considerada como Bien de Interés Cultural (1931) y como Patrimonio de la Humanidad (1985). Su entrada tiene un precio de 5€ y la subida a la torre de 2€. Un dato a tener en cuenta es que no se puede visitar únicamente la torre, con lo cual estas son las opciones que ofrece la catedral:

1. Visitar el interior (5€)
2. Visitar el interior y subir a la torre (7€)

La visita al interior se realiza de manera individual y la subida a la torre se realiza mediante visita guiada a una hora concreta. La subida consta de tres pisos en los que se visiona un breve documental, se conoce la antigua casa del campanero y se accede al campanario para admirar las vistas. Para más información: https://catedralsegovia.wordpress.com/

Catedral de Segovia

El Alcázar es el tercer imprescindible de este recorrido por Segovia. Como si de un castillo de cuento se tratara, se alza imponente frente a la Plaza de la Reina Victoria Eugenia. Datado del siglo XII, ha servido como fortaleza, palacio real, prisión, museo de artillería y academia militar. Son diversos los reyes que han residido entre sus muros y es al rey Felipe II al que se le debe su aspecto actual tan similar a los castillos de Europa del Este. También considerado Patrimonio de la Humanidad (1985), actualmente es un museo y en él se guardan archivos históricos y militares. 

Alcázar de Segovia

Las entradas al palacio se obtienen en el edificio situado a su izquierda, llamado Casa de la Química. La visita se puede realizar de tres maneras: entrada completa (8€), entrada al palacio y al museo de artillería (5,50€) y subida a la torre de Juan II (2,50€). La entrada completa comprende el acceso a las salas de palacio, al museo de artillería y a la torre de Juan II. Si se desea visita guiada, el suplemento es de 1€. En mi visita al Alcázar escogí la entrada completa con visita guiada. Éstas se realizan a una hora determinada y tiene una duración de 30-45 minutos. Dicha visita finaliza en el museo de la artillería que se hace individualmente así como la subida a la torre. Una vez acabada la visita guiada, se puede permanecer más tiempo en el interior. Antes de entrar hay que tener presente que el Alcázar sufrió un incendio en el siglo XIX y que es una reconstrucción lo que se puede ver hoy en día.

Personalmente, la duración de la visita me pareció breve teniendo en cuenta que se trata de un edificio en el cual han sucedido muchos acontecimientos históricos importantes tales como la coronación de Isabel de Castilla 'la Católica' y el enlace matrimonial entre Felipe II y Ana de Austria. Un relato demasiado escueto y centrado en la decoración del edificio para todo lo que ha ocurrido entre esos muros. A mi parecer, el interior es llamativo pero el Alcázar gana más por fuera.

Para más información: http://www.alcazardesegovia.com/

El Alcázar desde el Mirador de la pradera de San Marcos

Los miradores cobran un gran protagonismo en Segovia debido a la cantidad que hay, así como los senderos que se encuentran a las faldas del Alcázar junto al río Eresma y al río Clamores. El mirador más popular, desde el cual se puede sacar la clásica foto del palacio, es el Mirador de la pradera de San Marcos. Sin embargo, existen otros como el Mirador del Alcázar y los dos Valles, el Mirador del Último Pino (estos dos se hallan muy cerca el uno del otro), el Mirador Museo de Segovia, el Mirador del Jardín de los Poetas, el Mirador de la Iglesia de la Vera Cruz, el Mirador del Valle del Clamores, el Mirador de la Canaleja, el Mirador del Acueducto... Desconozco si habrá alguno más, aunque creo que estos ya demuestran la variedad de miradores que tiene Segovia.

Puente Río Eresma, Casa de la Moneda
a sus espaldas y el Alcázar al fondo

Como he mencionado, al lado del río Eresma se extiende un sendero que recorre la zona más baja de Segovia. Un buen recorrido sería caminar por el Paseo de la Alameda del Parral hasta llegar al Puente Río Eresma desde el cual, bajando unas escaleras, se accede a un sendero junto al río que lleva al barrio de San Marcos y, por lo tanto, al famoso mirador. Descubriendo las zonas verdes de Segovia me di cuenta de que el turismo más acertado para  esta ciudad está vinculado a la naturaleza sin dejar de lado la Historia que la envuelve. Por ello, recomendaría esta visita a aquellas personas que les apasione el senderismo y perderse por la naturaleza.


No obstante, Segovia no es sólo lo que os muestro sino que tiene más para visitar. El Monasterio Santa María del Parral, el Monasterio San Vicente el Real, el Santuario de Nuestra Señora de la Fuencisla, la Iglesia templaria de la Vera Cruz, el Museo Real Casa de la Moneda (su apariencia es similar a la del Alcázar, puesto que fue fundada por Felipe II), el Museo de Segovia, los Jardines del Rey, el Jardín de los Poetas, la Torre de Lozoya, la Plaza de Medina del Campo, el Paseo Salón de Isabel II, el barrio de la Judería... Además, recorriendo sus calles empedradas se descubren fácilmente todas las iglesias románicas que posee y los edificios históricos que ahora tienen otra utilidad como, por ejemplo, la Casa de los Picos (Escuela de Arte y Diseño), la Alhóndiga o la Cárcel Medieval (centros de exposiciones).

Datos de interés

Bus: 1€ dentro de la ciudad, 2€ de la estación de tren a la ciudad/de la ciudad a la estación de tren.
Platos típicos: sopa castellana, lechón asado (cochinillo), cocido de judiones, ponche segoviano (postre).
Producto típico: cochinillo, chorizo de Cantimpalo.

Vistas desde la Torre de Juan II
 Alcázar

Fuente de las imágenes: I.Martín