Caterina Sforza, la dama guerrera del Renacimiento

Caterina Sforza
Fuente: es.wikipedia.org

Caterina Sforza nació en 1463 en Milán (Italia). Su padre era Galeazzo Maria Sforza, duque de Milán, y su madre Lucrezia Landriani, su amante. A pesar de ser hija ilegítima, creció como una más en el seno de la familia y recibió una adecuada educación. Era aficionada a las artes y a la milicia, lo que denotaba su espíritu guerrero desde pequeña. Con el tiempo se ganó el apodo popular de 'Vampiresa de la Romaña', entre otros. 

En 1473, con solo diez años, la unieron en matrimonio con el duque de Imola y sobrino del Papa Sixto IV, Girolamo Riario, veinte años mayor que ella. Así es como Caterina se convirtió en la señora de Imola, pero en vez de instalarse en el ducado del esposo, se instalaron en Roma para estar cerca de la corte papal. Allí dio a luz a cinco hijos, entre los que se encuentra el futuro duque de Imola y Forlì, y donde hizo de intermediaria entre la corte romana y la milanesa lo que le dio cada vez más prestigio.

Imola
Fuente: pranzoinitalia.com

Castillo de Sant' Angelo
Fuente: megaconstrucciones.net

En 1484 murió el Papa Sixto IV y comenzaron las disputas entre las familias adineradas de la Italia de la época para elegir nuevo Papa, ya que cada familia quería que estuviera en ese cargo uno de los suyos. Caterina no estaba dispuesta a perder sus privilegios por el cambio de Papa y, embarazada de siete meses, aprovechó la ausencia de su esposo para cruzar a caballo el Tíber y ponerse al frente del ejército para defender su patrimonio territorial y el castillo de Sant' Angelo. Aquello consiguió que algunos cardenales enemigos se echaran atrás para no morir en el intento y, finalmente, se llegó a un acuerdo: Caterina y Girolamo dejaban Roma a cambio de no perder el señorío de Imola, de la entrega del ducado de Forlì y del nombramiento de Girolamo como capitán general del ejército vaticano. Giovanni Battista fue el elegido como nuevo Papa bajo el nombre de Inocencio VIII.

Forlì
Fuente: cambiaforli.it

En 1488 Girolamo fue asesinado por los partidarios del Papa y Caterina pasó a ser la regente de los dos ducados porque su hijo Ottaviano contaba con apenas nueve años. Fue en este momento cuando se conoció su faceta política bajando los impuestos y acordando alianzas matrimoniales entre sus hijxs y lxs hijxs de los duques de otros Estados vecinos para mantener buenas relaciones. Estos actos le hicieron ganarse la simpatía de la ciudadanía. Además, ella misma se puso al mando de las instrucciones de su ejército sin ayuda de nadie. Meses después de la muerte de su esposo se casó en secreto con el joven Giacomo Feo con el que tuvo un hijo al año siguiente, Bernardino Carlo. Era tan grande su amor por él que apartó a su hijo Ottaviano de sus responsabilidades como futuro duque y dejó que fuera su nuevo esposo el que llevara las riendas del Estado y que su familia política estuviera al frente de las fortalezas. Esta situación dio lugar a la división de opiniones entre lxs ciudadanxs, ya que surgió un grupo que estaba en contra de Giacomo y a favor de Ottaviano. Precisamente este grupo fue el que asesinó más tarde a Giacomo y a su familia. Caterina, dolida, mandó asesinar a todos los que habían cometido el crimen y a sus respectivas familias.


En 1497 contrajo matrimonio con el florentino Giovanni de Médicis con el consentimiento de su tío Ludovico Sforza. Un año más tarde nació Giovanni dalle Bande Nere ('de las Banderas Negras') que se convertiría en alguien importante en la Historia de Italia, pero la desgracia volvió a sobrevolar en la vida de Caterina. Mientras ella estaba inmiscuida en los conflictos entre Florencia y Venecia, su esposo moría de neumonía. 

Fortaleza de Ravaldino
Fuente: portalnet.cl

Más tarde el nuevo Papa, Rodrigo Borgia, aunque conocido como Alejandro VI, mostró su deseo de incorporar a los Estados Pontificios las ciudades estado de la Romaña, región donde se localiza Imola y Forlì. Caterina no estaba dispuesta a permitirlo y amplió su ejército, reforzó las defensas de las fortalezas y almacenó comida y municiones en caso de asedio por parte de César Borgia, hijo del Papa. El 19 de diciembre de 1499 el ejército de Borgia había arrasado con Imola y Forlì, y se dirigía  a la fortaleza de Ravaldino donde Caterina residía. Ella se puso al mando de sus ejércitos y rechazó cualquier propuesta de paz. El 12 de enero de 1500, después de muchas batallas, las tropas de Borgia entraron en la fortaleza y se llevaron presa a Caterina. Bajo la custodia de César Borgia, ella fue su amante, pero la hizo sufrir humillaciones de todo tipo hasta que la envió al palacio Belvedere cerca de Roma. Caterina, fiel a su espíritu rebelde, intentó fugarse y la acusaron de preparar un atentado contra el Papa con cartas envenenadas así que la internaron en el castillo que tan ferozmente había defendido tiempo atrás, el de Sant' Angelo.

Palacio Belvedere
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Antigua cárcel y convento de Santa Maria delle Murate
Fuente: urbanfile.org

Permaneció encerrada hasta el 30 de junio de 1501 (poco tiempo en comparación con otras mujeres de la Historia) gracias a la influencia del rey Luis XII de Francia. Se refugió en la villa de su tercer esposo en Florencia e intentó recuperar sus tierras una vez fallecido el Papa Alejandro VI, pero lxs ciudadanxs de Imola y Forlì se opusieron y pasaron a manos de un noble llamado Antonio Maria Ordelaffi.

Caterina pasó los últimos años de su vida cuidando de sus hijxs y estudiando alquimia. En mayo de 1509 falleció con 46 años de neumonía y fue sepultada en el convento de Santa Maria delle Murate. En 1835, lamentablemente, su tumba se destruyó por las reformas que se hicieron en el convento para convertirlo en una prisión. 


Como dato curioso, se cree que Caterina Sforza es una de Las Tres Gracias de Botticelli.

Las Tres Gracias en la Primavera de Botticelli
Caterina Sforza a la derecha
Fuente: meditacionesdeldia.com